¿Cómo afecta el Covid-19 al acero mexicano?
La pandemia mundial actual ocasionada por el virus Covid-19 ha traído numerosas consecuencias, entre ellas varías para la industria mexicana del acero.
Consecuencias inmediatas
El año 2020 trajo consigo expectativas renovadas para muchos sectores que exploraban nuevos proyectos y formas innovadoras para trabajar, sin embargo el futuro tenía otros planes en mente. La pandemia global que se vive actualmente producto del Covid-19 ha llevado a miles de millones de personas alrededor del mundo a pausar sus labores y por ende, la producción de muchos materiales, incluida la industria del acero.
Según estimaciones del FMI (Fondo Monetario Internacional) se espera una recesión mundial como repercusión de la pandemia, sin embargo, no todas los sectores se verán igualmente afectados, por lo que la pregunta es ¿Cómo afecta esto a la industria del acero?
La situación actual se encuentra en un punto en donde muchas plantas que producen acero se encuentran detenidas, mientras que las pocas que siguen laborando no tienen el mismo nivel de producción que tendrían regularmente. Al parar muchos sectores que compran acero para cubrir sus necesidades también ha ocurrido una baja en la demanda de este material.
Situación en México
En México, el Gobierno Federal determinó a la industria del acero como “esencial” por lo que sus labores no han sido reducidas por completo, aunque por el bienestar del capital humano se ha reducido el personal que trabaja en lugares cerrados para evitar contagios. Estás medidas protegen a la industria pero, la relación con otros sectores que han sido detenidos le han afectado.
Las mayores industrias que compran acero en el país que son la de la Construcción y la Automotriz han parado casi por completo, por lo que la demanda de acero ha bajado considerablemente, sobretodo en cuanto a grandes empresas tanto constructoras como fabricantes de piezas o ensamblaje.
Estimaciones indican que se espera una reducción de consumo entre 15 y 20 por ciento sobre lo esperado, lo que se traduce en 2 millones de toneladas en promedio que no se producirán. Sin embargo, no todo son malas noticias, ya que, en comparación con la última crisis mundial del 2008, en donde un escenario similar ocurrió, al año siguiente se reportó alrededor del mundo que la demanda de acero se incrementó el doble, por lo que el repunte de esta industria es más que probable.
Otro escenario alentador es que la baja del material abre la puerta a industrias emergentes para que empiecen a planear sus proyectos para cuando se reanuden las actividades sociales, por lo que es una gran oportunidad para comprar materiales y aprovecharlos con vista al futuro.
Recuerda tomar en cuenta los puntos mencionados anteriormente a la hora de elegir el material que más te convenga.
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